Pros y contras de las diferentes facetas profesionales en el ámbito del juego

En estos años he sabido lo que es tener una tienda, una editorial, ser autor y tener un podcast.  En esta entrada voy a contaros cuales son, en mi opinión, las ventajas y desventajas de cada una de estas opciones profesionales.

Empezando por tener una tienda, fue una de las experiencias más positivas que he vivido.  Me resultó muy bonito explicar juegos, difundir la afición, e incluso cumplir los deseos de alguien (una vez vino un señor que había jugado a un juego y ya no recordaba su nombre. Aquel juego le traía muy buenos recuerdos pues lo jugaba con antiguos amigos de estudios... Y además resultó que no estaba publicado en España.  Contacté con los chicos de la tienda Jugarxjugar de Barcelona, con los cuales tenía buena relación, y les pregunté si había posibilidad de que ellos lo tuviesen... ¡y bingo! tenían una copia en el almacén que alguien les había solicitado hacía años y no había ido a recoger.  Cuando me enviaron el juego y se lo entregué a aquella persona su cara de felicidad lo dijo todo).   

Con una tienda puedes organizar torneos, concursos, talleres... recuerdo que había clientes que me decían que así daba gusto trabajar, ¡todo el día jugando! Pero lo malo es que tener una tienda conlleva muchos gastos: alquilar un local si no somos dueños de uno, su mantenimiento, pagar impuestos, pagar un autónomo, la luz, comprar juegos para estar a la última...  Y los beneficios son muy ajustados.  Además es fundamental que la tienda esté en un buen lugar y que seamos cordiales y educados con los clientes. Que el ambiente sea abierto, alegre, limpio e incluso familiar si queremos triunfar entre los aficionados de todas las edades. 

Mi opción para abrir una tienda sería hacerlo en sociedad y que tuviésemos otro trabajo estable, de forma que las ganancias de la tienda fuesen un complemento a nuestro trabajo oficial.  Digo abrirla en sociedad porque si tenemos otro trabajo nos será difícil echarle horas al negocio, por lo que o bien repartimos esta tarea o bien si la abrimos solos necesitaremos contratar a alguien, sumando este gasto a todos los que ya tendremos.  La segunda opción que veo buena para abrir una tienda de juegos es que tengamos pareja y esta tenga un trabajo estable, de forma que nuestro sueldo sea un complemento al "sueldo" ya existente, al menos al principio.  De esta forma podremos llevarlo mucho mejor los primeros años que son los que peor lo vamos a pasar en el aspecto económico.

Otra faceta profesional que he podido vivir ha sido como autor.  Si bien no he publicado ningún juego de mesa sí he publicado un par de libros de mi autoría.  Ser autor no nos va a permitir vivir de ello a no ser que vendamos muchos libros o juegos y publiquemos varios proyectos al año.  Calculo que para poder vivir de forma decente como autor necesitaría publicar como mínimo 8 o 9 proyectos al año y que se vendiesen medianamente bien, y aún así creo que no llegaría a tener un sueldo decente.  Quizás con los años, tras haber publicado un par de docenas de juegos o libros, sea posible vivir de publicar, o bien si la labor como autor la complementamos dando cursillos sobre como escribir, talleres de creación de juegos, organización de festivales o jornadas, organizar viajes lúdicos y otras actividades relacionadas con nuestra labor, consigamos vivir de la autoría.

En mi opinión ser autor nos puede servir para dar rienda suelta a nuestra imaginación y ganas de crear, además de proporcionarnos de vez en cuando unas vacaciones o algunas cenas.

La siguiente opción que he vivido es crear un podcast.  Hay personas, no muchas, que pueden vivir de un podcast o un canal de vídeo.  En mi caso nunca he ganado dinero con el podcast ni con los vídeos que he publicado, por lo que poco puedo decir o aconsejar.   Creo que para poder vivir de esto necesitarías obviamente hacer publicidad, mucha publicidad, y para hacerla tendría que escucharte o verte muchísima gente, de forma que quien la contrata vea que le sale a cuenta.  Poco más puedo opinar sobre este tema.

En cuanto al podcast, lo ideal sería "meter la cabeza" en una emisora de radio, pero creo que no existe ninguna emisora comercial que incluya programas lúdicos en sus ondas. 

La opción de tener un medio de comunicación la veo, profesionalmente hablando, como una forma de darte a conocer ante los aficionados y antes los profesionales.  Estás en medio de ambas vertientes y ambos te escucharán si eres bueno en tu labor.  Además te servirá para aprender en el caso de que quieras avanzar profesionalmente en otros ámbitos, como abrir una tienda, crear una editorial, entrar a trabajar en una editorial, etc.  Y muchas veces el aprendizaje y los contactos que puedes conseguir no tienen precio.

La cuarta opción sería la editorial.  En esta es en la que estoy enfrascado últimamente.  Hoy día con las campañas de mecenazgo es muy accesible crear una editorial, otra cosa es que podamos vivir de ella.  Creo que si creamos la editorial con idea de vivir de ella a la larga, es fundamental hacernos distribuidores, no solo de nuestras publicaciones, sino también de los libros y juegos de otras personas.  Quizás pequeñas editoriales que por si solas no pueden distribuirse, o unirte a otra editorial de tamaño y peso similar a la nuestra para juntos crear una buena distribuidora.  Y lo mejor de todo es que para crear una editorial no necesitaremos adelantar grandes sumas de dinero.  Podemos montar el negocio en casa.  El coste de hacernos autónomo y poco más ya que podremos tirar de mecenazgos y almacenar los libros en casa (siempre que no pidamos muchos claro... yo creo que entre 300 y 500 libros por publicación es factible guardarlos en casa unas semanas hasta que se los enviemos a los mecenas y al distribuidor).  Si se trata de un juego de mesa, en cuyo caso suele fabricarse como mínimo unas 1000 unidades, tendremos que hablar con un distribuidor para enviar allí los juegos lo más pronto posible, pues 1000 cajas, dependiendo del tamaño del juego, ocupan mucho espacio.  Si vamos a hacer algo así será importante contar con una habitación en casa (o en casa de algún familiar) donde poder guardar los juegos hasta que se los enviemos a los mecenas y al distribuidor. 

Si hacemos esto al principio no necesitaremos un local, y además tampoco estar de cara al público como en una tienda (solamente en jornadas si queremos dar a conocer nuestra editorial, pero tampoco es imprescindible), ni pagar luz u otros gastos extras que sí pagaremos en un local.  Y algo que es muy importante: si vemos que no nos funciona el desembolso no habrá sido tan alto como para arruinarnos.  Pero ya digo, todo esto gracias a los mecenazgos ya que hace unos años hubiese sido impensable no tener que pedir un préstamo bancario para sacar a la luz cualquier publicación. 

Además tener una editorial nos permite formar parte del proceso de creación de un libro o un juego. ¡Vale!, no somos los autores, pero podemos influir mucho en el producto final, por lo que siempre habrá una parte de nosotros en cada una de las publicaciones que hagamos.  

Si más adelante decidimos, tal como he comentado, hacernos distribuidores sí que precisaremos de un local o sitio donde guardar el material hasta que se lo enviemos a las tiendas.  Si damos este paso es porque la editorial nos está funcionando y algo de dinero conseguimos, por lo que podremos permitirnos ese lujo, aunque sea un local pequeño en la zona más económica de nuestra población.  Contactar con tiendas y con una empresa de transporte de fiar será fundamental para asentarnos como distribuidores.  Lo negativo es que siempre estarás a la sombra de tus publicaciones.  El aficionado conocerá al autor de este libro o de este juego, conocerá el nombre de la editorial a lo sumo, pero pocos sabrán que tras ese nombre estás tú, por lo que para el ego no es tan reconfortante como ser autor, tendero o you tuber.

Tras estas opiniones, añadiría que es fundamental tener ganas, buena actitud, una mente abierta, dispuesta a aprender y a dejarse aconsejar por aquellas personas que saben, y no rendirse nunca ante aquello que de verdad queremos hacer... y sobre el tema de las tiendas, si nos decantamos por abrir una, que sea en una buena zona, la mejor a ser posible, en un local con mucha luz, de ambiente agradable, que de gusto estar allí, y apostar fuertemente por nuestro negocio, no quedarnos a medias.  Si vemos que económicamente no podemos hacer las cosas bien desde el principio no recomiendo abrirla.  He visto cerrar muchos negocios por no estar en el lugar ideal, no tener espacio para hacer aquellas cosas que los clientes desean hacer, un tendero demasiado "amigo" de los clientes, mala ventilación, poca luz, etc.